lunes, 29 de marzo de 2010

Nuevo Gobierno reconoce a la Iglesia por su ayuda para damnificados del terremoto

Cristóbal Lira, Delegado Presidencial para la Emergencia, élder Carlos H. Amado, Presidente del Área; élder Lawrence E. Corbridge, Primer Consejero de la Presidencia de Área; Rodrigo Hinzpeter, Ministro del Interior, élder Juan Carlos Barros, Setenta de Área, y Fernando Ocampo, director de Asuntos Públicos de la Iglesia.



En su primer día como ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter se reunió con la Presidencia de Área y recibió la donación de un cargamento con carpas, colchonetas y frazadas, entre otras especies, para los afectados por el sismo y posterior maremoto.
En su primer día como ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter se reunió con la Presidencia de Área y recibió la donación de un cargamento con carpas, colchonetas y frazadas, entre otras especies, para los afectados por el sismo y posterior maremoto.

Agradecido por la ayuda humanitaria entregada para los damnificados del terremoto del 27 de febrero e impresionado por la capacidad de organización que la Iglesia exhibió para trasladarla rápidamente a Chile se mostró el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, al recibir la donación que los Santos de los Últimos Días entregaron a la campaña Levantemos Chile.Pese a que el viernes 12 de marzo tenía una recargada agenda de actividades en su primer día de trabajo en La Moneda, Hinzpeter quiso reservar unos minutos para reunirse con los líderes de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días y agradecerles por el aporte que llegó vía aérea desde Lago Salado, Estados Unidos.Al encuentro, realizado en el Palacio de La Moneda, asistieron los élderes Carlos H. Amado y Lawrence E. Corbridge, presidente y primer consejero del Área Chile, el élder Juan Carlos Barros, gerente de Bienestar del Área, y el hermano Fernando Ocampo, director del Consejo de Asuntos Públicos del Área.La delegación de la Iglesia se reunió primero con el Delegado Presidencial para la Emergencia del Terremoto, Cristóbal Lira, a quien se le detalló el contenido de la donación. Se trata de mil ochocientas carpas, mil ochocientas lonas, nueve mil colchonetas, mil botellas purificadoras de agua y siete mil kits higiénicos, además de gran cantidad de frazadas y pañales.Lira se mostró muy agradecido por el aporte de la Iglesia para los damnificados, en especial porque las carpas y lonas permitirán proteger a las familias que perdieron sus casas en el terremoto y posterior maremoto.Al Delegado Presidencial se le explicó que éste es sólo un primer embarque con ayuda humanitaria, pues se trata de las últimas reservas que la Iglesia guardaba en sus bodegas luego de haber despachado la mayoría de sus recursos de emergencia a Haití, la isla caribeña que fue afectada por otro terremoto, el 12 de enero pasado.En efecto, fábricas de China e India están produciendo otras diez mil carpas de campaña -cada una con capacidad para seis personas- que serán enviadas a Santiago.Minutos más tarde el ministro Hinzpeter se integró a la reunión. Tras informarse sobre el detalle del aporte, el titular de Interior reiteró los agradecimientos del Gobierno hacia la Iglesia y reconoció sentirse admirado por la organización y disciplina mostrada por los miembros.Hinzpeter preguntó sobre el origen de los recursos que le permiten a la Iglesia realizar este tipo de ayuda humanitaria, ocasión en que el Presidente Amado le explicó la doctrina sobre la cual se basan los principios del diezmo y de las ofrendas de ayuno.Junto con reiterar los agradecimientos del presidente Sebastián Piñera, el ministro del Interior enfatizó que las puertas de su cartera están abiertas para mantener constantes lazos de amistad entre el Gobierno y la Iglesia.

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